DESCANSO EN VILLA AVECIA (BOLIVIA 2006)

viernes, 29 de octubre de 2010

QUITO—IBARRA (110Kms)



Fue uno de los mejores días de viaje que tuve en el Ecuador ¡Por fin salió el sol! Pude hacer casi todo el recorrido con aire fresco y con el contraste de luces y sombras que destacaban la belleza y profundidad del paisaje.

A las 11 hs argentina (13 hs ecuatoriana) llegué a la concesionaria BMW. La moto estaba esperándome recién bañada. Fue una gran alegría al verla solitaria y aburrida detrás de las rejas que la protegían. Sentía como si ella presintiera mi llegada y se viera aliviada al verme entrar.

Es algo increíble como se humanizó este objeto conmigo, casi como si fuera una mascota. Un objeto inmóvil que no dice nada pero que expresa y significa tanto para mí.

Viajar solo en la moto es una poética —lo reitero—, un medio para comunicarme con lo Inefable, con lo Divino, con lo Eterno. Allí dialogo con las múltiples voces interiores que me interrogan, que me responden, que me recriminan, que me acusan, que me halagan y que me señalan siempre algo nuevo a ver o a tener en cuenta: lo maravilloso, lo inefable, lo misterioso, lo Sagrado que se oculta en ese pájaro que levanta vuelo al sentir el rugido del motor; en ese niño pequeñito que camina en la banquina solitario con su uniforme escolar y la mochila en sus espaldas y gira su cuerpito diminuto al verme pasar; en esas nubes maravillosas que dibujan en el cielo múltiples imágenes; en el devenir que se percibe con más fuerza durante el recorrido, con sus escenas fugaces que se escapan veloces a mis lados; en ese saludo, que después de una larga e intensa charla, será el último; o en ese escarabajo gigante que se esconde al sentir apoyarse mis botas en el suelo...

En síntesis, la moto es un instrumento, como cualquier otro, que me permite llegar al Misterio, al Élam Vital, o adelantarme al Punto Omega de Teilhard de Chardin; un instrumento como la Iglesia lo es para el creyente.

Después de cumplir con los requerimientos previos a la entrega de la moto, a las 12 hs argentina (14 hs ecuatoriana) partí de la BMW con destino Ibarra. El recorrido duró tres horas. El paisaje fue hermoso como lo podrán apreciar en el link del Blog “View my gallery”. A las 15 hs en punto ya estaba alojado y feliz en el hotel.

Esta llegada con tiempo me permitió conocer a un seguidor de este Blog, nativo de Ibarra, de nombre Fernando Mosquera, que me ofreció en un mensaje enviado al Blog, toda su ayuda para cuando pasara por esta ciudad. No podía dejar de saludarlo. Un tipazo de ley, como decimos los argentinos, simpático y muy agradable. Estuvimos charlando largo rato, entre otras cosas, sobre las precauciones que debería tomar una vez que ingresara a Colombia: cuáles zonas o caminos recorrer y cuáles no.


....................................nnnnnnnnn..Un rostro auténtico
FRONTERA CON COLOMBIA
Mañana saldré hacia la frontera, alrededor de las 10 am de argentina. Esto me permitirá estar allí a más tardar a las 12 hs para hacer todo el papeleo, cruzarla y arribar a la ciudad de Pasto (Colombia) a las 15 hs.

En Pasto tomaré contacto con la nueva realidad; me haré asesorar sobre la etapas venideras y los recaudos a tener en cuenta para que la seguridad esté, dentro de lo posible, garantizada.

Ibarra , Ecuador, 29 de octubre de 2010
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1 comentario:

Juanfer dijo...

Hola Luis.... me dio mucho gusto conocerte y compartir experiencias y amistad contigo... sigue tu ruta con la suerte y cuidado que has tenido hasta hoy...... disfruta cada día de tu viaje y de tu vida con el mismo don de gentes que tienes y serás un grande entre los grandes.... recuerda siempre que en una pequeña ciudad del Ecuador cuentas con un amigo.... Un abrazo y hasta pronto